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Sede de la empresa Polígono de Granadilla S.A. 1998
Esta semana ingresa mi amiga y colega María Isabel Correa (de Correa y Estévez, Arquitectos) como miembro de número de la sección de Arquitectura de la Real Academia Canaria de Bellas Artes. Este es un extracto del discurso de recibimiento que he preparado para ese acto.
Desde hace muchos años, María Isabel Correa es una profesional que se distingue por lograr una arquitectura acogedora, de una manera que aparenta sencillez, pero que incorpora un inmenso trabajo que no somos capaces de vislumbrar a primera vista. Sin embargo, lo que ya es muy destacable es la gran calidad de ejecución que tienen todos sus edificios.
Una de las cualidades más admirables de Maribel Correa es su capacidad para empatizar con aquellos que deben ejecutar sus órdenes. Porque la arquitectura es una disciplina que no depende del esfuerzo de una única persona, sino que es el resultado de la intervención de múltiples operadores y artesanos, cada uno con sus objetivos y su experiencia personal de trabajo. Ella consigue lo que otros no podemos hacer tan eficazmente: involucrar a casi todos los que intervienen en el esfuerzo común para lograr edificios de magnífica factura.
Más valiosa aún es su gran profesionalidad, su capacidad para entender las necesidades reales de aquellos a los que aporta su arte. Sobre todo, si observamos que vivimos en una época en la que impera una concepción económica mal entendida. Un desempeño técnico y artístico ligado al comercio y a la producción de obra con el exclusivo objetivo del máximo lucro; y en la que las razones artísticas o, meramente, la calidad de la arquitectura son valores que no suelen interesar realmente más allá de simples operaciones cosméticas o publicitarias.
Dos obras iniciales, que obtienen sendos Premios Oraá de Arquitectura Canaria, abrirían con enorme éxito la trayectoria profesional de esta arquitecta en Santa Cruz de Tenerife a comienzos de los años 80.
Edificio comercial García y Correa. El Mayorazgo, 1984
Son, por un lado, la sede de García y Correa de 1985, un edificio brillante en el que se manifiesta una preocupación por lograr las mejores condiciones funcionales en un interior constreñido y encajonado que es el resultado de las posibilidades de la parcela. Cuando se visita ese espacio lo que impresiona es el enorme esfuerzo que se aporta con una factura esmerada y pulcra para conseguir un simple espacio resonante y luminoso a modo de basílica.
Y por otro, la reforma del Círculo de Bellas Artes de 1986 en la céntrica calle del Castillo, que es otra obra primeriza en la que ya se condensan sabiamente algunas bases metodológicas y formales de la actuación de Maribel Correa: Allí, se produce una solución que libera de residuos el espacio disponible y clarifica su organización funcional pautando un recorrido; también se generan nuevos recintos atractivos y polivalentes, aplicando un sabio y simple uso de los materiales, el refinamiento de los detalles y un correcto remate decorativo. El éxito de esta intervención lo atestigua su uso continuado para múltiples actos y exposiciones durante los últimos veinticinco años.
Se podría establecer que la sede de García y Correa y la reforma del Círculo de Bellas Artes, son todavía trabajos en la estela del estudio PER, casi una prolongación natural en las que Maribel Correa manifiesta claves estilísticas y formales muy de la época. Ambos trabajos son herederos todavía de los resabios formales de sus mentores. Son obras teñidas de aquella idea de la arquitectura postmoderna imperante a comienzos de los años 80 en la que, estilísticamente, había que hacer -de alguna manera- un homenaje a la arquitectura de corte neohistoricista anterior al Movimiento Moderno que ocupó casi la totalidad del siglo XX.
Croquis representativo de la idea compositiva del edificio Múltiples II. Santa Cruz de Tenerife, 1988
Unos recursos compositivos y formales diferentes en el entendimiento de los sitios surgirían en 1993, cuando Correa y Estévez ya juntos, afrontan el proyecto para el edificio administrativo del gobierno de Canarias, conocido como Múltiples II, situado al comienzo del ensanche de la ciudad de Santa Cruz. El esfuerzo se centraría allí en la definición monumental de una de las entradas más representativas de la ciudad. La idea de la obra se apoyó en un formalismo expresionista, en la que una torre circular central y una composición de bandas horizontales darían una respuesta adecuada a las expectativas del lugar. Aquí se recurriría consciente o inconscientemente al ejemplo de algunas obras y dibujos del alemán Erich Mendelsohn, como los almacenes Schockem de Chemnitz, en una estrategia de doble volumetría en esquina que posteriormente les serviría también para el planteamiento ganador realizado para el concurso de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife en 2007.
En el edificio Múltiples II se produce por primera vez esa estrategia que les distinguirá en muchos trabajos posteriores y que se refiere a una integración amplía de la arquitectura para producir un resultado de un alto refinamiento y durabilidad: Me refiero a consideraciones como, la provisión de espacios altamente funcionales, una espléndida definición constructiva, junto con el exquisito cuidado del interiorismo y la incorporación de otras expresiones artísticas. En ese caso, la inteligente inserción de una pieza escultórica de en el patio central enriquece aquel espacio.
Algo similar ocurre con la sede del Cabildo de La Gomera. Una obra de 1997 que se preocupa por ofrecer un remate respetuoso al entorno en el que se sitúa la histórica Torre del Conde, a la que enmarca de alguna manera. Este edificio monocromático, con su recubrimiento de piedra toba roja de la isla, ofrece un telón sumamente adecuado para el realce de aquella pieza defensiva que define los inicios de la colonización del archipiélago. El Cabildo de La Gomera responde al carácter monumental y representativo que debe tener la institución principal de gobierno en aquella isla, solucionando al mismo tiempo los requisitos funcionales y administrativos necesarios.
En ese mismo año de 1997, Correa y Estévez inicia un ciclo de trabajos relacionados con la reinterpretación de la arquitectura heredada; un trayecto en el que estos arquitectos han ofrecido muestras de una maestría indudable. Probablemente, les ha servido para ello el gran bagaje de conocimiento constructivo y el amor a las formas y procedimientos de la arquitectura popular que les otorgó su paso por la Escuela de Aparejadores de La Laguna, previo al inicio de la carrera de arquitectura.
Rehabilitación del espacio cultural Cabrera Pinto. La Laguna, 1992
El primero de ellos, la rehabilitación del Instituto Cabrera Pinto de la ciudad de La Laguna, es una obra que estuvo sujeta a múltiples tensiones derivadas de su carácter patrimonial señero en ese casco histórico fundacional. El resultado final es una obra muy representativa de un momento cultural concreto.
Allí se transformó un edificio que había sufrido innumerables intervenciones negativas, en un conjunto de espacios limpios que recuperaban brillantemente las esencias espaciales y constructivas del pasado y, al mismo tiempo, se mejoraría su confort para un uso diferente al original. Los mejores edificios son capaces de adaptarse a lo largo de las generaciones y, en este caso, el antiguo convento de San Agustín ha pasado a convertirse en un recinto cultural esencial para la isla de Tenerife, aportando la magia de conservar sus patios centrales y la aparición de nuevas interpretaciones espaciales en sus interesantes interiores.
Otra obra más reciente que continuaría las ideas y esfuerzos aportados a la conservación del patrimonio histórico es, la restauración del antiguo Hospital de Dolores para nueva biblioteca de La Laguna. Allí se ha producido una conservación impecable de los valores históricos y culturales lográndose también introducir nuevos usos y servicios sin violentar ni la estructura espacial preexistente ni los sistemas constructivos tradicionales. El mayor éxito de esa intervención ha sido la forma en que se han integrado los servicios e instalaciones técnicas necesarias, simple y eficientemente, y sin que constituyan un impedimento a la percepción de la auténtica arquitectura heredada.
Escultura Trampa de viento de Juan López Salvador. Las Américas, 1998
Años después se terminaría una de las mejores obras de estos arquitectos. En mi opinión, ese es el proyecto para las oficinas de la empresa rectora del Polígono de Granadilla en el sur de Tenerife, un trabajo que manifiesta una sensibilidad exquisita con el paisaje que la circunda. En ese trabajo, el equipo de Maribel Correa utiliza los materiales naturales del lugar para realizar una reconfiguración de algunas estrategias constructivas de nuestros antepasados en clave contemporánea.
Ese edificio interpreta el lugar explotando las mejores condiciones paisajísticas del emplazamiento. Allí se estudia la orientación hacia los elementos naturales, el sol, los vientos, las visuales paisajísticas, etc. junto con la definición de un proyecto de espacios a caballo entre el interior y el exterior consiguiendo unos magníficos ambientes representativos y de trabajo. Todo ello complementado con unas interesantes intervenciones, escultóricas y de jardinería, muy apropiadas para un lugar de una aridez extrema.
Algo parecido ocurre en la gran reforma ejecutada en el paseo costero de la ciudad turística de Las Américas. En esa frontera entre el mar y la tierra, se realiza una depuración eficiente de la accesibilidad peatonal y una disposición sencilla de pavimentos y mobiliario, mejorando radicalmente el disfrute colectivo del lugar. También se introduce allí con sensibilidad una de las piezas escultóricas más brillantes que se ha hecho recientemente en un espacio público de esta isla, la llamada Trampa de Viento del escultor Juan López Salvador.
En 2002, Correa y Estévez realizan el acondicionamiento de los espacios interiores representativos y de oficinas de la monumental Casa de los Capitanes en la ciudad de La Laguna; un espacio previamente rehabilitado. En ese trabajo se muestra nuevamente la habilidad que este equipo tiene para mejorar el resultado en el remate sensible de los edificios. La selección, disposición e integración de piezas de mobiliario, iluminación y complementos es en este caso muy acogedora y excelente sin renunciar al empleo de elementos plenamente contemporáneos.
Interiorismo de la Casas de los Capitanes para las oficinas de la Alcaldía de La Laguna. 2001
Lo traigo a colación porque en Canarias es una cuestión que se suele relegar a un segundo plano y en las intervenciones y obras públicas se suele hacer de muy mala manera. Sin embargo, en el caso de la mayoría los edificios de estos arquitectos, este complemento esencial se logra combinar de una manera natural, mejorando enormemente la calidad estética general y la factura final de los espacios. Aunque pareciera un esfuerzo menor, la labor de asesoramiento a los usuarios en la fase final en que se ocupan los edificios, resulta esencial para el éxito y el mantenimiento impecable posterior de la arquitectura
María Isabel Correa representa una forma de hacer que ha ejercido ya una indudable influencia sobre las generaciones siguientes, lo que se nota en el trabajo de otros muchos arquitectos canarios que han seguido sus proyectos y han aprendido con su obra una manera de hacer de alta calidad de elaboración.
En una época en que los arquitectos experimentamos un vértigo de cambios sin igual y en la que también nos sentimos agobiados por una multitud de exigencias sin parangón en el pasado, es reconfortante valorar el esfuerzo de personas como María Isabel Correa y el conjunto de todos aquellos que la ayudan a realizar esa arquitectura de extraordinaria calidad.
Patio interior del edificio Múltiples II. Santa Cruz de Tenerife, 1988—>
(…ssshhh…¿y dónde está ese discurso que lo quiero leer? ¿o lo cuelgas después del acto?…)
De FA tengo yo unas cosillas de sus comienzos “contraculturales”, no me lo hubiera imaginado tan floral.
Besos
El discurso completo lo publicará la Academia en sus volumen de Anales el próximo año.
Cuando hablas de FA, Virgi ¿A quién te refieres?
Pues de F. Álamo, en la floristería de tu blog.
Es que ya sabes que algunos con la edad, nos volvemos viejos verdes y hacemos cualquier cosa para tratar con chicas guapas.